Parálisis cerebral, pacientes epilépticos, desórdenes neuromusculares que provoquen pérdidas de equilibrio, en caso de que el cráneo del bebé no esté totalmente formado, después de una operación, como protección para prevenir posibles golpes, espasticidad y en todos aquellos casos en los que el riesgo de producir contusiones craneales esté presente.
Casco de protección craneal fabricado con foam acolchado transpirable, forro de rizo interior y recubierto de tejido de panal, aportando resistencia y durabilidad. Se ajusta mediante una cincha que pasa por debajo de la barbilla; esta cincha posee un protector de neopreno que evita posibles molestias y rozaduras sobre el paciente; además también tiene un sencillo sistema de cierre mediante hebillas de plástico y su longitud puede ser modificada con un pasador situado en las hebillas, pudiendo así ajustar el casco de forma correcta según la anatomía de cada paciente.
Un casco de protección craneal es un dispositivo ortopédico diseñado para reducir el riesgo de lesiones en la cabeza. Está indicado para personas con epilepsia, problemas de equilibrio, parálisis cerebral, autismo o cualquier condición que aumente la posibilidad de caídas o golpes en la zona craneal.
El casco ortopédico de protección craneal está fabricado para ofrecer seguridad y confort en el día a día de personas con necesidades especiales. En cambio, los cascos deportivos están diseñados para impactos de alta velocidad y no proporcionan la misma adaptabilidad para uso prolongado o clínico.
Sí. Existen cascos de protección craneal pediátricos adaptados al crecimiento infantil, y modelos para adultos con características enfocadas en la estabilidad, el confort y la estética en personas mayores o con movilidad reducida.
Para una correcta protección craneal, mide el contorno de la cabeza y compara con la guía de tallas del fabricante. El casco debe quedar bien ajustado, sin oprimir ni moverse durante el uso.
En muchos casos sí. Las caídas domésticas son una de las principales causas de traumatismos craneales. Usar el casco en el hogar puede ser clave para evitar lesiones en personas con alto riesgo.
El tiempo de uso depende del nivel de riesgo. Algunas personas necesitan protección craneal durante todo el día, mientras que otras solo en actividades específicas como caminar, asearse o hacer ejercicios terapéuticos.
La mayoría de cascos permiten una limpieza sencilla con un paño húmedo y jabón neutro. No se recomienda el uso de productos abrasivos ni sumergir el casco, para preservar su acolchado y materiales protectores.
Los mejores cascos de protección craneal combinan espuma EVA, policarbonato y tejidos transpirables. Estos materiales ofrecen ligereza, ventilación y resistencia ante impactos leves o moderados.
Sí. Algunos modelos se presentan con acabados similares a gorras o gorros, lo que permite una protección craneal eficaz sin renunciar a la estética o la aceptación social, especialmente en jóvenes o adultos activos.
Existen ayudas sociales, subvenciones y prestaciones por dependencia que pueden cubrir este tipo de producto ortopédico. Consulta con tu centro de salud o con tu trabajadora social sobre cómo acceder a esta ayuda para protección craneal.
Tu ortopedia en Sevilla y Huelva, contamos con más de 125 años de experiencia en suministros, fabricación y adaptación de productos ortopédicos.